Título: Puedes seguir niña
Autor: Maximino Ames Turienzo
Puedes seguir niña
Pero niña, ¿qué manera de escribir es
esa?, ¿cuántas veces tengo que decir que hay que estirar más las vocales?, no
te das cuenta, así no se puede leer lo que escribes. Déjame a mí, mira como lo
hago. ¿Ves? Ahora tú. Muy bien niña, muy bien, veo que prestas atención. Menos
mal que alguien escucha lo que digo, aquí nadie me hace caso. Bueno, por hoy se
acabó la escritura, a recoger.
Niña toma el libro de Historia, página
11, vamos a leer. Recuerda las tres reglas: lee despacio, vocaliza y hazte
preguntas. Estamos le-yen-do.
Los numantinos recibieron a algunos de
los soldados de Viriato, por lo cual Roma les declaró la guerra ...
Un momento niña, no tan deprisa. Vamos a ver, ¿quién era Viriato?,
¿tú sabes quién era Viriato? No sirve de nada leer si no nos hacemos preguntas.
Por mi cara adivinaba que no iba a
responder, entonces ella, sonriendo y con un ¡ay! que dejaba sin aire sus
pulmones, recitaba de carrerilla: Viriato, pastor lusitano que plantó cara a
las legiones romanas en el año 147 es nombrado general en jefe. Muere
traicionado por tres de sus hombres que lo asesinan en el año 139. Llevamos
tres semanas leyendo la misma página. El libro se lo regalé yo las ultimas
navidades que pasó en casa, era uno de los que había usado en la escuela de
Espinaredo.
Historia de España para Primer Grado de
Bruño.
Puedes seguir niña, puedes seguir.
María, me voy. Mañana vuelvo a la misma
hora. ¿Qué tal ha estado esta semana?
Mejor cielo, mejor. Más tranquila, dijo
el doctor que la nueva medicación le está viniendo bien. Sabes, cuando le ha
visto entrar en la habitación se ha puesto nerviosa, le preguntó si estaba
haciendo algo mal para que desde Oviedo mandasen a un inspector. Y tú, ¿qué tal
en el nuevo instituto?, ¿dan mucha guerra las nuevas generaciones? ¡Si tu
abuela pudiera verte! Bueno ya me entiendes, verte te ve pero... Sí María, no
te preocupes.
Mi abuela, a pesar del alzheimer, no ha
cerrado la puerta de su escuela. Lleva abierta desde que ella tenía 18 años y
se fue a dar clase a un pueblo de la montaña de Infiesto movida por los ideales
republicanos.
Bonito cuento.
ResponderEliminarGracias a Escuela Benaiges por promover la inquietud literaria.